pink head.La película se burla del cristianismo

 

En HELLRAISER III--HELL ON EARTH, el diablo en forma de Pinhead es conjurado y causa estragos y destrucción en todos los que lo encuentran. Una reportera de televisión investiga a Pinhead y casi cae en la destrucción. La película es oscuramente perturbadora en su flagrante burla y blasfemia de Jesucristo y el cristianismo. Sin embargo, los efectos especiales son sobresalientes y tienden a reforzar el mal contenido en la película, ya que graban indeleblemente las imágenes horripilantes en la mente del espectador.

CONTENIDO:

(LLL, SSS, VVV, NN, O, Ab, A/D) aproximadamente 21 obscenidades y 4 blasfemias; baile lascivo, fornicación gráfica entre extraños seguida del espantoso asesinato de la amante por un demonio que la despelleja viva antes de devorarla; numerosos asesinatos sangrientos con ganchos, cadenas y discos afilados como navajas; desnudez femenina superior; ocultismo, satanismo y situaciones metafísicas; demonio blasfemando a Cristo y burlándose de la Sagrada Comunión obligando al sacerdote a comer gusano; y, embriaguez y comportamiento inmoral.

MÁS DETALLES:

HELLRAISER III–HELL ON EARTH evoca al diablo en la forma de Pinhead, un demonio infernal que cobra vida comiendo la carne y la sangre de sus víctimas. Al principio, Pinhead está encerrado de forma segura en una gran escultura metálica (que parece retratar a los pecadores ardiendo en el fuego del infierno). Un joven rompe un cubo dorado de la escultura y las cadenas sobrenaturales del interior del cubo se adhieren al hombre haciéndolo gritar en agonía. Una reportera de televisión observa al hombre en el hospital y lo ve electrocutado por las cadenas hasta que su cabeza explota en un chorro de sangre. La reportera intenta resolver el misterio de lo que le sucedió al joven y casi se destruye ella misma.

La película se burla del cristianismo y blasfema contra Jesucristo. En una escena, por ejemplo, un sacerdote empuña un crucifijo e intenta acudir en ayuda del reportero, pero Pinhead derrite el crucifijo mientras recita el segundo mandamiento: "No te inclinarás ante ninguna imagen esculpida". Además, Pinhead imita la crucifixión de Cristo y obliga al sacerdote a comer gusanos grotescos en una vil parodia de la Sagrada Comunión. Los cineastas se burlan repetidamente tanto de la Biblia como de Cristo con su retorcido sentido del humor y retratan a Dios como inexistente. Sin embargo, los efectos especiales son sobresalientes y tienden a reforzar el mal general, ya que graban indeleblemente las imágenes horripilantes en la mente del espectador.

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