su estrategia principal es atrapar al hombre en sus propias negligencias

Bendita sea la hora en la cual entré en religión,



un moje en su lecho de muerte, le oyeron decir estas palabras: "Maldita sea la hora en que fui hecho religioso". Luego, en breve silencio, con un rostro sereno, expresó: "Bendita sea la hora en la cual entré en religión, y bendita sea la Madre de Cristo a la cual siempre he tenido devoción". Aturdidos por las palabras contradictorias, y temerosos tras la primera declaración, los religiosos se retiraron apresuradamente, dejándolo solo. Después de aproximadamente dos horas, él mismo los llamó con el enfermero, el único que había quedado, y entre lágrimas les dijo: "Hermanos míos, os turbasteis y atemorizasteis, y con razón, al escuchar las primeras palabras en las que maldije la entrada a mi religión. Debo informaros que en ese momento se me aparecieron dos demonios con un aspecto terrible, amenazándome y diciéndome: 'Ya venimos por ti, desdichado fraile'. El miedo que experimenté al oír esto fue tan intenso que me hizo perder la compostura y pronunciar las palabras que escuchasteis. Os digo con sinceridad, que si se ofreciera un horno de fuego, encendido con metal y piedra azufre, que durase hasta el fin del mundo, y se me diera a escoger entre entrar en ese fuego o volver a ver a aquellos horrendos monstruos, elegiría padecer aquel fuego. Pero debéis saber que la piadosa Reina, consuelo de los afligidos, acudió de inmediato y ahuyentó a los demonios. La hermosura de su divino rostro es tal que en ese instante concebí una esperanza firme de que seré salvado. Por eso la bendije y le agradecí por tan singular misericordia". Apenas pronunció estas palabras, expiró.
De las palabras de este religioso podian hacerse , no una , sino muchas exhortaciones : decir que por no ver otra vez aquellos horrendos monstruos , padecería un horno de fuego encendido hasta la fin del mundo , es cosa que habia de despertar nuestra flojedad , y hacernos abrir los ojos para vivir con el temor santo de Dios . 
Si solo dos demonios atemorizando , que será una legión ? qué será tantas legiones como las que están en aquellos calabozos esperando nuestras almas ? 
 Sea visitar á un enfermo y contarle los ejemplos de este dia ; y ahora digamos la oracion que le decía San Cirilo Alejandrino . 
. Madre del Verbo Eterno apiádate de mi : muchas y muy graves son mis culpas , mas tú , Madre piadosa , responde por mí en el juicio tremen- do , y de mi aparta los impedimentos todos de mi salvación , y alcánzame verdadera pureza y buen espíritu , para que del todo me separe de las cosas mundanas , y solo á tí , y á tu Hijo consagre mi corazon . Amen . 

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