su estrategia principal es atrapar al hombre en sus propias negligencias

Por la cruz de Cristo que rompió las prisiones del infierno.'"

 

 en la pasión de santa Justina: un hombre poderoso la quiso conquistar, pero ella no quiso unirse a él ni con súplicas, promesas o amenazas. Él intentó raptarla, pero ella hizo la señal de la cruz y perdió él su poder. Cuando Cipriano, un hechicero, le dio dos talentos a otro para hechizarla, y este aplicó un ungüento diabólico, surgió una gran tentación. Pero al hacer la señal de la cruz, el demonio fue confundido y huido.

Cipriano fue llamado por otro que le dio un remedio más fuerte, pero también fue rechazado por el signo de la cruz. Finalmente, llamó a un príncipe de los demonios que se transformó en una mujer virgen para seducirla, pero al intentar unirse a ella, volvió en sí y fue expulsado. El demonio fue conjurado por Cipriano y, obligado a hablar, respondió: 'Por la cruz de Cristo que rompió las prisiones del infierno.'"


Comentarios